domingo, 25 de julio de 2010

El comienzo

Este es el primer capítulo... no sé si debía poner el prólogo o no, pero no tenía uno preparado. Espero que esto sea suficiente para entender bien a Any (Aneliz)


¿Qué tan complicado era ponerse un vestido?
, me preguntaba para mis adentros sarcástica.

Me miré al largo espejo que tenía al frente. Un vestido en realidad colorido, que me llegaba hasta las rodillas, con un listón bajo el pecho y que me gustaba mucho reposaba en el antebrazo del sillón de mi habitación. Sopesaba la idea de ponérmelo o no.

Sacudí mi cabeza, tenía un extraño presentimiento de que aquella noche iba a ser la más maravillosa de todas… ¿Por qué? En realidad tampoco tenía idea. Mi mamá siempre había dicho que tenía un sexto sentido, la percepción.

Me volví para mirar el vestido. No, no debo… me repetí por enésima vez en el día.

En ese momento alguien tocó la puerta.

-¡Any!- dijo mi mamá desde el otro lado de la puerta.- ¡Abre!

-Ya voy.- dije poniéndome la bata azul que había dejado sobre la cama.

Abrí la puerta. Mi mamá, una mujer de pelo castaño y rizado hasta la cintura, con ojos de un azul claro y piel pálida como la luz de la luna, me miró de pies a cabeza con el seño fruncido.

-¿Se puede saber qué has estado haciendo? Nos vamos en media hora, cariño. Recuerda que esta reunión es muy importante para tu padre.- dijo mi mamá entrando a la habitación.

Mi rostro se contrajo en una mueca de disgusto. No tenía ganas de ir en lo absoluto. Mamá tomó el vestido y se acercó a mí con decisión. Me miró inquisitiva.

Suspiré resignada y me quité la bata.

-¡Sigues en pijama!- dijo mi madre desconcertada.

-Puedo explicarlo…- dijo algo dudosa.

Mi madre negó con la cabeza y me tomó del brazo. Me llevó directamente al baño y empezó a hacer magia con sus manos. Me colocó el vestido, me ayudó a maquillarme y por su puesto a peinarme. Aunque en realidad ya tenía la edad suficiente como para hacer aquello sola, había cierto sentimiento hacia mi madre, que me hacía dejarla.

Cuando terminamos, me miré al espejo. Mi mamá corrió al armario y sacó mis zapatos. Volvió y dejó que cayeran al piso. Me los metí rápidamente. En ese momento alguien tocó la puerta. Corrí a abrirla. Mi padre me miró con enojo.

-Siempre es lo mismo. Señoritas tenemos que irnos en este mismo momento o llegaremos tarde como la última vez.

-Richard, no te desesperes, tenemos cinco minutos de sobra.- dijo mi mamá revisando el reloj que traía en la muñeca.

-No en el mío.- contradijo mi papá.

Reí y le di un beso en la mejilla. Éste sonrió y me abrazó.

-Cuánto has crecido.- dijo con nostalgia.

-Papá…- me quejé.

Mi mamá rió y nos empujó hacia las escaleras. Bajé rápidamente y corrí por mis llaves.

El día que mi madre me las había entregado. Me dijo que era una gran responsabilidad y que debía cuidarlas con mi vida. Desde entonces había tomado el hábito de llevar las llaves a todos lados. La mariposa de metal, que pendía del llavero destelló con los rayos del sol que penetraban por la ventana. Miré por un momento el llavero. Sentí náuseas. Me volví, mi papá me apremiaba con un movimiento de mano al lado de la puerta abierta. Corrí y pasé a su lado dirigiéndome al auto. Mi padre cerró la puerta tras de él. Le abrió la puerta del copiloto a mi madre. ~Suerte que aún no se perdía toda la caballerosidad~. Me metí al auto rápidamente y me senté con precipitación. Mi padre arrancó al instante en el que se acomodó en su asiento. Me miró por el retrovisor.

-¿Ya les había dicho que se ven hermosas?

Reí.

-Gracias.

-Cariño, creo que nuestra jovencita va a romper algunos corazones esta noche.- dijo mi papá con sorna.

Lo miré juguetona.

-Tienes razón, me da la impresión de que hoy se ve hermosa.- siguió mamá con una sonrisa perfecta y juguetona.

Negué con la cabeza y miré ausente hacia la ventana. Nunca me consideré tan linda como ellos siempre decían. En realidad me parecía que mis mejillas estaban muy rellenas y mis brazos muy gordos. Anduvimos por carretera durante un largo rato, hasta que llegamos a un enorme aparcamiento. Ahí estacionó mi papá el auto y nos ayudó a bajar a ambas. Al lado había un enorme edificio al que le calculé treinta pisos. Caminamos un buen tramo hasta llegar a una puerta giratoria. Al entrar, no me sorprendió que hubiera una fuente con una escultura de oro en el centro. Un hombre que tomaba de la cintura a una bella joven y se preparaba para besarla. Empezaba a estilarse en ese momento ese tipo de material. Casi todos los edificios de esta región tenían ese tipo de cosas. Caminamos por una alfombra roja que nos condujo a un escritorio. La recepcionista nos vio por un momento.

-¿Viene a la fiesta del señor Mateus, cierto?- preguntó con voz forzada.

Parecía antipática.

-Sí ¿Nos podría decir cómo llegar?- contestó mi papá con más cortesía de la que merecía la mujer.

-Claro, suba al elevador aquí a mi izquierda. El salón de fiestas está en el piso dos.- dijo la recepcionista mirándome recelosa.

Le sonreí intentando tranquilizar el ambiente, pero no sirvió de nada. La mujer siguió mirándome.

-Gracias.- contestó mi papá en un susurro y le pasó el brazo por el hombro a mi mamá.
Los seguí pisándoles los talones. Subimos al elegante elevador, si cabía mencionar. Papá pulsó el botón con el número dos marcado. El silencio reinó el lugar por un momento, pero era un silencio cómodo. Fue entonces cuando se abrió la puerta del elevador. Papá como siempre, reviso el reloj.

-A tiempo, chicas. Es récord en realidad.- dijo orgulloso.

4 comentarios:

  1. Holaa soy alexa y me encanta tu blog e historia! soy tu primera seguidora ;) recien me entere de tu blogs y lei tus historias y me pregunte por que no? jaja bueno en fin me gusta mucho tu historia besoss alexa. :)

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  2. Me considero fan de esta chica y su blog! si q todo mundo se entere!! (por obvias razones q la creadora de este blog conoce )

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  3. Hoola Nessi
    Bueno, me presento soy Deny. Acabo de empezar a leer tu blog, gracias a qe lo recomienda siempre Luu, y como sigo su blog desde hace mucho, pense en pasarme por el tuyo qe parecia interesante. Se qe estoy comentando una entrada qe escribiste en el 2010, hace un toqe laaaaaaargo de tiempo, pero no podia comentar el ultimo capitulo qe escribiste porqe como no lo lei todavia, qedaria mal. Asiqe aca estoy :) A partir de ahora voi a seguirte, aunque nose si comentarte capitulo a capitulo cuando vaya leyendo, porqe son ya viejos. Nosee, te molestaria si los comento? Pasa qe me encanta escribir y bueno, para darte mi punto de vista, quiza, si te interesa :)
    Bueno, solo era para decirte eso, voi a seguir tu historia, ciertamente me gusta mucho como escribis. Y la historia parece entretenida.
    Sueerte, y Besos
    Deny

    Pd: Decime si te parece bien qe te comente algun qe otro capitulo a medida qe vaya leyendo, porqe la verdad es qe nose si es qe te llega algun aviso qe diga " En tal o cual capitulo te dejaron un comentario" o algo asi, Jjajaja nose. Decime :)

    Pd2: Me gusta mucho la musica qe le pusiste al blog, La cancion de cuna qe le escribe Edward a Bella en crepusculo ♥ Es muy tierna.

    Beesotes
    Deny

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    1. :D :D :D ¡Deny! :D :D :D :D Me alegra muchísimooo ;) En seriooo que eres completamente bienvenida y puedes comentar cuando quieras, porque en realidad amoooo los comentarios y recibirlos me alegra muchísimoo también, entonces ;) ;) ;) hahaha lo maloo es que no me llega ningún avisoo hahaha pero aún así. Eres libre para comentar. Diviértete.

      Inés/Nessy

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¡Me encantan los comentarios! Agradezco que te hayas pasado unos minutos.